martes, 23 de junio de 2015

Caída

Cuando se cae mi piel mi cuerpo cruje y arden sus huesos
La gravedad consume el tiempo  y su caída se hace eterna porque el techo ejerce más fuerza que el piso mojado.
Mi cara no conoce la sensación de huir de los dedos
Las yemas cuelgan como lastres indiferentes al destino, mientras los perros que aúllan lo hacen por nostalgias que también están mojadas
Mientras flota se deshace como mi sensación de tenerte segura
Mientras flota todo cambia y florecen ecos juzgadores que imitan a todas las voces
Mientras flota me humedezco de un líquido asqueroso y putrefacto que aglutina pequeñas crías de moscas en su viscosidad agria
Mientras los perros miran que los nombro con mi boca desencajada e inocente.

Cuando se cae mi piel esta rebota y se dispara como pedazos huachos lánguidos salmón violeta pegotes y de puntas ásperas y sin filo
No mato a nadie que no me haya matado o no intente hacerlo
¡Perros de mierda cállense! ¡Por la puta que no es su casa!

Cuando se cae mi piel, lo que queda es siempre lo que queda.
Soy arena hilvanada en temblores y una montaña de ropa para ensuciarla en casa
Cuando se cae mi piel no quedan grados para curar mis higienes enfermas
Soy una razón constante para que no huya la verdad de mi mano.